Las casas nuevas pueden tener un valor superior.
El pensamiento convencional es que una casa nueva costará más que una casa existente.
La regla general parece ser que comprar una casa nueva de una constructora puede significar de 15 a 30% más que comprar una casa comparable más vieja en un vecindario existente.
De hecho, en septiembre de 2014, la Asociación Nacional de Constructores de Viviendas (NAHB, por sus iniciales en inglés) reportó que el precio promedio de una casa nueva era $259,000, mientras que el precio promedio de una casa existente era $210,300.
La clave para comparar los precios de casas nuevas vs. casas usadas, sin embargo, es asegurarse de comparar manzanas con manzanas y peras con peras, según advierte Ed Hudson, Director de Investigación de Mercadeo de Home Innovation Research Labs, una filial de NAHB. “Comparar precios promedio está bien, ¿pero acaso las casas son del mismo tamaño? ¿Tienen las mismas características? Las casas más nuevas normalmente son más espaciosas y tienen características más modernas.”
Es más, dado que el mercado de las casas nuevas se está recuperando muy lentamente, los constructores de viviendas todavía ofrecen buenos tratos sobre opciones o costos de cierre. Los costos se pueden reducir aún más si el constructor te permite poner algo de “capital de esfuerzo,” es decir, hacer parte del trabajo de acabado de la construcción por ti mismo.
Seleccionar mejoras Premium, tales como electrodomésticos o gabinetes de tope de gama, encimeras de granito, alfombras de alta densidad, pisos de madera o un sistema de HVAC de mayor eficiencia, puede, por supuesto, aumentar el precio final de tu nueva casa.
Además, las casas nuevas vienen con algunos costos adicionales, tales como el mantenimiento de un césped nuevo, conexiones nuevas de servicios y cable, y posibles evaluaciones de vivienda o cuotas de asociación de la comunidad. También puede que sientas la necesidad de comprar muebles nuevos, una lavadora/secadora nueva, cortinas, jardinería, cercado, etc.
Construir una casa personalizada cuesta aún más. La construcción de una casa verdaderamente personalizada por lo general implica el gasto de un arquitecto, así como el costo de un préstamo para construcción, permisos, cuotas por impacto, preparación del terreno, conexiones de servicios, aceras, vías de acceso y un posible pozo o campo séptico. Si todas las cosas son iguales, normalmente cuesta de 20 a 30% más construir una casa personalizada que una casa de producción en serie, según Hudson. La construcción de una casa nueva normalmente cuesta de $200 a $400 por pie cuadrado.
Asimismo, construir una casa nueva puede llevarse meses, o en el caso de una casa realmente personalizada, hasta una año, y requiere la participación del comprador a la hora de seleccionar las opciones de diseño y de productos, hacer visitas a la obra y recorridos de la casa. Al comprar una casa existente, a menudo se puede cerrar el trato y mudarse en menos de dos o tres meses.
¿Qué obtienes por esta prima?
Independientemente de la diferencia de precio y compromiso requerido, un gran porcentaje de gente prefiere, y compra, una casa nueva. He aquí el porqué:Obtienes lo que quieresUna razón clave por la que la mayoría de los compradores preferiría una casa nueva en lugar de una existente es que una casa nueva les permite obtener exactamente, o más exactamente, lo que quieren o necesitan de una casa. Los desarrollos de casas nuevas ofrecen numerosos planes y opciones para personalizar tu casa.
Las casas semi personalizadas ofrecen más flexibilidad y a menudo permiten algunas opciones de personalización limitadas antes de finalizar la construcción. Las casas realmente construidas a la medida, por otra parte, te permiten establecer especificaciones exactas para la casa de tus sueños.
Todo es nuevoComprar una casa vieja es una lotería. Uno nunca sabe realmente lo que le va a tocar o cuánto durarán los techos, artefactos eléctricos, accesorios, bombas, horno o aire acondicionado. Puede que sea necesario hacer reparaciones o renovaciones inmediatas.
“Los productos en una casa nueva,” explica Hudson, “tienen menos desgaste. Un aire acondicionado normalmente debe ser reemplazado cada 20 o 30 años. Con una casa nueva, estás pagando por tener más tiempo antes del reemplazo de las partes mecánicas u otros objetos costosos.”
En una casa recién construida, todo es nuevo. Toda casa nueva viene con una gama artefactos nuevos, como lavavajillas y muchas incluyen lavadora, secadora y nevera, todo nuevo. A diferencia de una casa usada, se requiere poco mantenimiento, al menos inicialmente, y no hay reparaciones que requieran atención. Los tejados, ventanas, pisos, armarios, encimeras, accesorios, bomba de sumidero y tanque de agua caliente son todos nuevos y tienen una larga vida útil antes de que alguno necesite ser remplazado. La casa tendrá tanto una garantía general del constructor como garantías individuales de los diferentes productos y electrodomésticos.
En los desarrollos de casas nuevas, incluso el vecindario es nuevo y a menudo tienen servicio de jardinería y lo último en cuanto a servicios recreativos. También puede ser más fácil “encajar” y hacer amigos, ya que todos los vecinos también son nuevos. Por último, no hay que pasar por alto el hecho de que hay un gran nivel de orgullo y emoción por ser el propietario de una casa nueva.
La casa es vanguardistaLas casas nuevas tienden a ofrecer una estética de diseño contemporáneo, por ejemplo, espacios abiertos, espacios flexibles, excelente diseño de las habitaciones, techos de gran volumen, pasillos amplios, suite principal en el primer piso, armarios más grandes y una articulación arquitectónica dramática que las casas viejas no pueden igualar. “Las casas nuevas son modernas,” señala Hudson, “con una distribución abierta que se adapta a los estilos de vida actuales.” Las casas más viejas, por ejemplo, tienden a tener techos de ocho pies (2.44 m). En una casa nueva, el techo del primer piso normalmente tiene una altura de nueve pies (2.74 m).
Las casas nuevas de hoy en día, construidas con tecnología actual y normas de construcción modernas, cumplen con las normas más actuales en materia de salud y energía y ofrecen mayor desempeño en cuanto a ventanas, aislamiento y sistemas de filtrado de aire y HVAC, además de técnicas que aumentan significativamente la eficiencia energética y reducen los costos operativos de la casa en comparación con casas más viejas. Las casas nuevas generalmente también tienen accesorios de plomería de bajo flujo, sistemas de iluminación de alta eficiencia y electrodomésticos con la certificación Energy Star.
“Los estándares de construcción han subido mucho en la última década,” agrega Hudson. “Las casas de hoy en día cumplen con códigos de eficiencia energética mucho más altos. Tienen mejores ventanas, son más herméticas y tienen sistemas de calefacción y enfriamiento más avanzados. Son más cómodas.”
Adicionalmente, las casas nuevas a menudo tienen el cableado necesario para lo más nuevo en cuanto a internet de alta velocidad, sistemas de comunicación, seguridad y protección anti incendios, conexiones para televisores de pantalla plana y tecnologías para el entretenimiento.
En fin de cuentas, resume Hudson, “las casas nuevas pueden tener un valor superior.”